sábado, 30 de junio de 2018

La palabra en juego

Título: La palabra en juego.
Autor: Enrique Sabaté.
Editorial: Domiduca Libreros.
Imprenta: Tecnología Gráfica S.L.
Año de publicación: 2014 (1ª edición).
Género: Poesía.
ISBN: [Sin ISBN]


La palabra en juego es el primer poemario publicado en libro del poeta y trovador Enrique Sabaté, uno de los más activos del panorama alcalaíno. Tiene otros poemarios publicados en pequeños libretos y hasta en postales, aunque su actividad más abundante es publicar en las redes sociales de forma muy prolífica. Este poeta veterano tiene espíritu humanista y pasado militar. Ha formado varios grupos de tertulia literaria y actualmente recorre España de pueblo en pueblo llevando la poesía y el romancero castellano con su voz profunda y su rabel. Sabaté  es además una de las personas inquietas que organiza en cuanto puede encuentros de poetas y actos poéticos ya con las instituciones, ya con librerías y bares o ya por cuenta propia. Quizá por todo ello Domiduca Libreros, a través del interés de Asela, una de las editoras, se interesó y publicó este poemario en 2014, la cual es una selección de la muy abundante obra de Sabaté que se había podido leer en Internet y algunos poemas que compuso para el libro. 

El libro muestra en sus solapas interiores una fotografía de Sabaté como si de un trovador del siglo XVI se tratara colado de repente en pleno siglo XXI en la Plaza de los Santos Niños, precisamente esa foto define bien su obra. La palabra en juego, cuya portada ubica a las palabras en un tablero de ajedrez, se divide en seis partes. Los poemas a veces se encuentran dedicados a personas conocidas del pasado o a personas que conoce él o bien son muy conocidas en Alcalá de Henares. Se trata de poemas con una métrica muy cuidada y estudiada y unas estructuras clásicas que recuerdan precisamente la poesía del Siglo de Oro de la Literatura española. El autor, buen conocedor del romancero castellano y la poesía clásica, hace gala de sus conocimientos y adopta para sí los mismos ritmos y tonos, poníendolos al servicio de una temática acorde a nuestros días, pero no muy lejana a lo que ya entonces se escribía. Aporta además el rescate de una gran cantidad de palabras antiguas y un cierto sentido barroco que dota a cada metáfora de un sentido estudio de su uso, por tanto: de su reflexión. Puede que algunos poemas hayan nacido en Sabaté de manera espontánea, pero cada poema contiene en sí ese sentido de poema estudiado. 

Hay autores, como Sabaté, que les resulta fácil componer poemas con métricas clásicas perfectas, quizá por la mucha práctica y la sensibilidad del autor. Compone jugando con facilidad con palabras y métrica, lanzando mensajes directos que envuelven otros más complejos. Sus poemas van de los poemas lisonjeros y amorosos, a los poemas que critican cuestiones sociales o políticas atemporales. Denuncia la falta de honestidad al mismo tiempo que en otros poemas aplaude lo auténtico en la persona y en otros, como he dicho, lanza mensajes amorosos. En medio, hay poemas dedicados o compuestos en torno a paisajes o personas alcalaínos que sirven de trampolín para tratar de fondo otros temas, como por ejemplo el paso del tiempo. En todo caso no hay una temática fija, al ser este libro una recopilación de poemas y al tocar Sabaté una gran cantidad de temas de su interés. La mejor guía para entenderlos son los nombres dados a las seis partes que dividen el libro. 

Sabaté, como trovador del siglo XVI venido al XXI, aporta como principal denominador común una forma de poesía de otras épocas traída al hoy para exponerla al oyente o al lector. Se siente cómodo componiendo en un lenguaje que recupera para hablar no el pasado sino del ahora. Sirva de ejemplo el poema compuesto a su amigo José Antonio Mayoral:

Tuno de las tunerías
por las calles de Alcalá,
unas veces viene o va
según sus astronomías.
Viste de sabidurías
el más común formulario
y ríe del silabario
en tan tremenda algazara
que es tenedor y cuchara
de los que diz, legendario.


Sabaté usa también del sarcasmo y de la ironía, no sólo de la seriedad, sobre todo para poner en evidencia los temas de comportamiento social que le parecen criticables por la citada falta de honestidad ("Y un poco más lejos / se viste de rana / un príncipe de esos / que está a la que salta"). Buena parte de sus poemas adoptan una forma verbal de primera persona del singular, lo que dota al libro de un sentido casi de reflexiones del poeta trovador de aquello con lo que se va topando en su paso por la vida. Muchas otros poemas son descripciones de situaciones o lugares siempre con un sentido incisivo, pues Sabaté suele apuntar con el dedo de sus palabras a modo de dardo contra la diana a la que apunta. Posiblemente es parte de ese poemario de trovadores, pues se adaptaría bien a un gusto popular de poder recibir un mensaje claro, a pesar del barroquismo de alguna de las composiciones. Todo poema es adaptable a ser cantado al modo tradicional castellano, lo que también tiene su peso en varias de las composiciones.

Al ser una forma compositiva de otro siglo, se transforma la obra de Sabaté en un poemario inconformista, aunque suene paradójico. Inconformista porque no sigue los modos de nuestros días. No es fácil encontrar lectores de poesía y es menos fácil ser publicado o escuchado, pero hacerlo además atendiendo a un modo antiguo y no a los modos actuales hace que Sabaté demuestre su inconformismo con las modas y se transforme a sí mismo en una persona honesta consigo mismo y por ello con quien le escuche o lea. Eso siempre es un punto a favor y deseable en todo escritor, es lo que hace apetecible su obra, sea su estilo el que sea, pues siempre será un estilo honesto, no impostado. Precisamente uno de los valores más reivindicado en las páginas de esta obra.
 
Reseña escrita por Daniel L.-Serrano "Canichu".

sábado, 23 de junio de 2018

La Universidad Laboral de Alcalá de Henares. Historia de una institución docente (1966-2016)

Título: La Universidad Laboral de Alcalá de Henares. Historia de una institución docente (1966-2016)
Autor: Carlos Mazarío Torrijos. 
Editorial: Domiduca Libreros. 
Año de publicación: 2017. (1ª edición)
Colección: Alcalá y su tierra en la Historia. 
Nº de volumen en la colección: 2
Género: Historia.
ISBN: 978-84-938059-5-1

El poeta e historiador alcalaíno Carlos Mazarío Torrijos publicó dentro de la colección Alcalá y su tierra en la Historia, de Domiduca Libreros, en 2017, lo que fue la primera aproximación seria a un aspecto desconocido de la Historia reciente de Alcalá de Henares desde un punto de vista serio de la investigación y las Ciencias Humanas, se trató en este caso del libro La Universidad Laboral de Alcalá de Henares. Historia de una institución docente (1966-2016). La Historia complutense desde el final de la guerra civil en 1939 en adelante no ha recibido toda la atención necesaria, a pesar de que en los últimos años han salido ya varios libros y artículos dedicados a asuntos represivos de la dictadura en la década de 1940. En este caso el autor se aproxima a la Historia social de la ciudad a través de la instauración de una de las Universidades Laborales que el franquismo comenzó a crear con sus planes de desarrollo de la década de 1950. La Universidad Laboral de Alcalá de Henares, conocida popular y documentalmente como ULAH, marcaría un nuevo ritmo y un renacer cultural a la ciudad hasta el punto que aún hoy día se sigue recordando a sus edificios como ULAH, a pesar de que desde los años 1970 pasó a ser primero un Centro de Enseñanzas Integradas, después un centro de Formación Profesional y actualmente, desde 1992, es el Instituto de Enseñanza Secundaria Antonio Machado. Como centro docente en cualquiera de sus etapas ha forjado a varias generaciones, cuando se escribió el libro cumplía cincuenta años de existencia. El libro hizo que recibiera una réplica en la prensa local, en un artículo publicado con fotos en el semanario Puerta de Madrid por uno de los antiguos alumnos de los años 1960-1970, el cual ponía en alza valores de recuerdo personal, sin valorar que este libro era un libro de Historia, no de memorias.

Carlos Mazarío (1977) es actualmente profesor y jefe del área de Historia en el propio IES Antonio Machado, por lo que para su investigación ha contado con la ventaja y el privilegio exclusivo, que hasta la fecha entre los historiadores sólo ha tenido él, de poder consultar los archivos de la institución, así como las fuentes orales de las personas más veteranas entre los funcionarios y antiguos alumnos vinculados a la ULAH. El archivo estaba muy desorganizado, sin una atención debida, sin clasificación ni mucho menos una organización regular y ordenada. Tampoco contaban los documentos con cajas acordes para su archivo, ni con un espacio adecuado y seleccionado para su uso como archivo del centro, dándose el caso que algunos documentos antiguos simplemente estaban agrupados por el mero casual de haber estado en el despacho de alguien en algún momento del pasado. Por ello mismo, Carlos Mazarío en 2018 afirmaba que había encontrado más documentación referente a los sucesos de la huelga de estudiantes de 1971, la cual recibió represión por parte del Estado. Tal vez eso le permita o bien ampliar el libro en una hipotética segunda edición, o bien publicar un artículo de Historia que amplíe el tema, por ejemplo dentro de los encuentros de historiadores del Valle del Henares. Lamentablemente no es la primera ni la única institución que descuida y maltrata su legado documental y con ello dificulta o impide conocer la Historia de nuestro pasado de los hechos que, aunque recientes, se olvidan, se desconocen por la mayoría o se distorsionan en el recuerdo.

Las Universidades Laborales fueron una apuesta educativa de Falange Española dentro del gobierno de la dictadura franquista. Respondían a la lógica revolucionaria de esa parte de la extrema derecha que fue acogida por el general Franco como parte necesaria del desarrollo de España. El país había quedado atrasado, empobrecido y embrutecido desde la guerra civil. Con el reconocimiento internacional y el final del aislamiento en 1953 el régimen se dio cuenta de la necesidad urgente que tenía de actualizar su industria y su economía, lo que pasaba por la formación especializada de los obreros en las novedades de las técnicas y las tecnologías de la época. Además, debían hacerlo tratando de grabar en los individuos el ideario falangista del hombre nuevo al servicio de la patria, acorde con el ideario general del franquismo. Dios, patria y Franco, eran la base para otra serie de ideas derivadas. En ese sentido, para poder manipular mejor el sentimiento de pertenencia y servicio al Estado se trató de separar a los alumnos de sus familias construyendo estos centros fuera de las grandes urbes y creando un régimen de residencia estudiantil que hacía que muchos jóvenes salieran de su hogar familiar. Más aún, en general las Universidades Laborales tomaron nota de las grandes arquitecturas propagandísticas que en la década de 1930 había exportado determinadas ideas de grandiosidad en la Alemania de Hitler y la Italia de Mussolini. Sin embargo, en el caso español, estas universidades laborales, a pesar de tener fama y prensa de nidos de ideas franquistas, se instalaron rápidamente sacerdotes con ideas democratizadoras (los conocidos popularmente como "curas rojos" o "curas obreros"), así como los alumnos y parte del profesorado abrazaron con facilidad ideas comunistas, haciendo que la censura tuviera que impedir los múltiples incidentes por altercados o actos clandestinos en estos centros, siendo más visibles en este sentido los actos de las Universidades no laborales. 

En el caso de la ULAH el edificio se instauró tardíamente dentro del plan  de creación de Universidades Laborales, aunque su construcción fue en un tiempo mínimo. Se inauguró en 1966, habiendo sido su arquitecto uno de los creadores de hospitales como La Paz, en Madrid. Por ello el edificio central tiene un aspecto y una distribución que recuerda las alas de un hospital de mediados del siglo XX. No se gastó en este caso grandes alardes de arquitectura que expresase grandiosidad o monumentalidad ni pasado glorioso, sino que se hizo lo más funcional posible, con elementos pobres cuya única decoración es el cromatismo de sus paramentos. Se construyó en los terrenos comprados o expropiados de los vecinos con tierras en lo que serían los futuros barrios del norte de la ciudad, los cuales se desarrollaron posteriormente en torno a la ULAH y a la industria que se generaría. La ULAH iba a ser construida como Universidad Laboral en Madrid, en los nuevos barrios limítrofes, pero se descartó el proyecto de esa ubicación y se prefirió Alcalá de Henares, lo que permitió al régimen fomentar en los noticiarios la idea de que Franco devolvía la Universidad a la ciudad, ya que esta había sido trasladada como Complutense a Madrid en 1836. En realidad la Universidad propiamente dicha regresaría en 1977, pero no sería la Complutense que funcionó en Alcalá desde 1499 a 1836, y desde entonces en Madrid, sino que sería una de nueva fundación con Juan Carlos I.

Si la ida de la Universidad en 1836 inició un periodo de decadencia urbana, el inicio de la ULAH en 1966 coincidió con la atracción de múltiples empresas a lo largo del tramo de carretera que a su paso por aquí unía Madrid con Zaragoza y Barcelona, por lo que inició un periodo de auge nuevo. La población alcalaína fue en aumento. La ULAH no sólo atrajo a jóvenes y familias de otros lugares de España, sino que además, aparte de su formación profesional, llegaron a fomentar una serie de actos culturales que enriquecieron la ciudad, como son por ejemplo sesiones de cine, actos deportivos, teatro, publicaciones varias, participación en actos clandestinos y de reivindicaciones tanto laborales como vecinales, etcétera. En 1971 había generado un ambiente tal que la policía del Estado tuvo que actuar de manera represiva. Fue, en definitiva, no sólo un motor de formación, sino también un motor de expansión de ideas democratizadoras contrarias a la dictadura, por más que algunos de sus cargos iniciales habían salido precisamente de lo más profundo de la dictadura.

El centro, además, contó con la innovación de prestarle atención especial a la informática, lo que era algo novedoso, probablemente germen de los estudios posteriores en la Universidad de Alcalá en el área de las carreras de telecomunicaciones. No sería la primera vez que la ULAH tratara de estar en la vanguardia de los temarios educativos. Desde que en 1980 pasara a ser Centro de Enseñanzas Integrales fue uno de los primeros centros en adaptar sus planes de estudio a la Formación Profesional y en 1992 fue uno de los primeros centros de España, y el primero en Alcalá de Henares, de adoptar la nueva ley educativa de 1990 transformándose en Instituto de Educación Secundaria.  En sus orígenes, además, fue motivo de varias noticias en la prensa estatal (como el ABC) y los noticiarios audiovisuales (como el NO-DO), al margen de una visita del general Franco en 1966. Aunque no estuvo exenta de diversas polémicas en torno a sus cargos directivos, ya por sus nombramientos no viniendo del mundo de la educación sino del ejército (como fue el caso del primer director), ya por otras causas unos años después que Mazarío menciona pero no explica.

La institución recibió visitas internacionales de relieve que se interesaron por sus programas de estudios y cómo se formaban sus alumnos en las diversas máquinas y nuevas tecnologías de la industria moderna, eso mezclado con formación humanística y de valores que pretendían infundir un sentimiento de pertenencia y amor al Estado y la patria. Por otro lado, la ULAH contó con regalos y dotaciones artísticas que hoy día se pueden ver a modo de cuadros y murales en sus paredes, algunos del siglo XVIII, otros de artistas contemporáneos de la propia época. Además, tuvo edificaciones desaparecidas como la piscina o las pistas deportivas hoy transformadas en salón de actos y teatro.

Se toca el tema del incendio que hizo deshabitar su zona superior, también por una disminución de su alumnado en los años 1970 finales, y la posterior eliminación de varias de sus plantas superiores por aluminosis, sobrecarga del peso del edificio y efectos perdurables de aquel incendio. La ULAH de hoy día es más baja que la ULAH de 1966.

Domiduca Libreros vuelve a apoyar con esta publicación el avance del conocimiento de la Historia local, la cual encierra en sí la esencia de una Historia común con el resto de España. Este libro es probablemente una vanguardia de lo que debiera ser el inicio de un conocimiento de la Historia alcalaína posterior a 1939. La ULAH fue vital y fundamental en el renacimiento complutense en la segunda mitad del siglo XX. Los cambios sociales y económicos en la ciudad no se entenderían del todo sin el conocimiento de esta institución y su interactuación con la ciudad.

Reseña escrita por Daniel L.-Serrano "Canichu".

sábado, 16 de junio de 2018

Lienzos y esbozos


Título: Lienzos y Esbozos.
Autor: Enrique Grande.
Editorial: Ediciones Albores.
Año de publicación: 2018 (1ª edición).
Género: Poesía.
ISBN: 978-84-17344-54-2

Ediciones Albores es una editorial con una consolidada red de distribución en España y que llega también a diferentes puntos de la geografía mundial. Se dedica a la publicación de narrativa, en esta ocasión, sin embargo, ha apostado por la poesía de Enrique Grande. Lienzos y Esbozos es el primer libro de este escritor alcalaino. 

Cuenta con un prólogo del propio autor en el que nos explica lo que la poesía representa en su vida. El titulo define metafóricamente su labor creativa. Los folios en blanco son lienzos en los que plasma sus poemas que a la vez son esbozos que el lector completa. El autor configura así una composición de rico cromatismo a base de pinceladas, unas veces sueltas, otras precisas, recreando imágenes que pretenden provocar en el lector un estallido de emociones.
 
De fácil y ágil lectura, este libro trae aires frescos a la poesía.


Reseña escrita por Pilar González Simancas.

martes, 12 de junio de 2018

Theodor

Título: Theodor.
Autor: César Varela Requena.
Editorial: Círculo Rojo Editorial.
Año de publicación: 2017 (1ª edición).
Colección: Infantil y juvenil.
Género:  Cuento infantil.
ISBN: 978-84-9183-120-4

César Varela Requena es un autor alcalaíno publicado a través de Círculo Rojo, la editorial especializada en apoyar y fomentar a autores que optan por las autopublicaciones y las publicaciones a medias entre editor y autor. En este caso se trata de un libro de cuentos infantiles cuyo protagonista es un niño que da nombre a la publicación, Theodor. Fue publicado a mediados del mes de diciembre de 2017, hecho del que se hizo eco la prensa local de Alcalá de Henares. Su difusión vía plataformas de Internet y grandes superficies comerciales favorecen su difusión, lo que es un aliciente para un autor novel con su primer libro, siendo además una apuesta en al que demuestra creer en él y su obra. Es el afán del autor que desea transmitir lo que mueve el proceso creador de la persona que siente la necesidad de narrar. 

Theodor pretende ser el primer libro de un personaje con el que su público preferente, el infantil, pueda vivir una serie de aventuras. O al menos eso se entiende si atendemos a la frase de su promoción que nos anima a disfrutar de esta aventura y de otros títulos del autor, no existiendo aún a fecha de hoy ningún otro libro del personaje ni del autor en la base de datos del ISBN, registrada en el Ministerio de Cultura y Deporte. Así pues, sobreentendemos que se desea la continuidad de este personaje, otra cuestión es que esta ocurra, de eso sólo tiene o tendrá respuesta César Varela. 

El libro se centra en una aventura que vive Theodor  en su ficción campestre, basada por su creador en un hecho real. Theodor es un niño atrevido, intrépido e imaginativo con afán de vivir una vida de héroe. Una vida imaginada, una vida en sus juegos. Se mete así en la psique de los niños, donde sus juegos mezclan historias ficticias dotando a sus vidas de la estimulación de una vida alternativa que en realidad no les corresponde y, además, les coloca en situaciones imposibles para un niño. Rellena así el espacio de un mundo imposible en la vida cotidiana, cosa que según crecemos se repetirá una y otra vez mutando en las formas del juego, el deporte, y otras pasiones como son las identificaciones en héroes de película o literatura o cómic o música o del amor, etcétera. Quizá sea por eso mismo que nuestras ilusiones de infancia se mantienen siempre, en unos más y en otros menos, con un recuerdo de pureza y sencillez que siempre nos es grato, como un paraíso perdido y lejos del conocimiento y las vivencias que nos privan de esa inocencia, al ser conscientes en la madurez de las consecuencias de muchas de nuestras decisiones en nuestras vidas y afectando a las de otros. Tal vez por esto mismo el libro está dedicado no sólo a los niños, sino también a los amantes de la infancia.

El libro es un libro ilustrado que se puede entender como material didáctico, pues el material pedagógico no falta en el relato y el dibujo. Un dibujo de líneas claras y finas y colores suaves que nos recuerdan los trazos de algunas de las publicaciones infantiles que se comercializaban en la década de 1980, así por ejemplo el barcelonés Teo que comenzó a pintar Violeta Denou desde 1977, obra infantil española que está traducida y comercializada en varios países. Obra también de corte pedagógico. Obra que quizá esté en la base de la creación y las ensoñaciones de infancia de nuestro César Varela, no obstante entre los nombres de Teo y Theodor hay un algo que nos resulta común.

El género del cuento infantil es uno de los más vendidos en nuestros días. Aquí hay una aportación reciente de un autor alcalaíno a esta literatura.


Reseña escrita por Daniel L.-Serrano "Canichu".