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sábado, 24 de febrero de 2024

El libro que no sabía leer

Título: El libro que no sabía leer.
Autora: Chus López (textos e ilustraciones).
Editorial: Rubiano Ediciones.
Impresor: Lozano Impresores.
Año de publicación: 2024 (1ª edición).
Colección: Infantil.
Nº de volumen en la colección: [Sin número]
Género: Cuentos; Literatura infantil; Ilustración.
ISBN: 978-980-18-3915-6 

 

La poeta Chus López lleva ya varios años que combina sus recitales con cuentacuentos infantiles con su propia obra. Esto viene siendo así desde que autopublicó sus dos primeros cuentos en 2021, Cuentos para volar en la cama y La gallina Purpurina. Ahora, en febrero de 2024, vuelve con otro cuento, El libro que no sabía leer, ahora editado por la editorial Rubiano Ediciones, presentado en Pub O'Malley's de la calle Goya de Alcalá de Henares. Conserva, eso sí, toda la marca de identidad de la autora iniciada en los dos anteriores libros, con sus características ilustraciones netamente näifs, o en nuestras palabras: al modo como ilustran los niños; conserva también el formato ligeramente apaisado en tapa blanda, aunque ahora contiene una faja naranja para enmarcar título y autora, en lugar de apropiarse de toda la cubierta la ilustración de portada. Igualmente también conserva en consonancia con los anteriores cuentos una nota de presentación de la autora dirigida a los lectores y especialmente al lector niño, tono que conserva en una especie de conversación de tú a tú de la autora con el niño y la niña. Tiene sus dedicatorias, esta vez a abuelos y gente querida por Chus, y en esas dedicatorias vuelven algunas ilustraciones de algunos de estas personas que le han hecho especialmente para el libro. Así pues, podríamos decir que en cierto modo Chus López ha creado su propia colección de libros infantiles. Son característicamente suyos.

Esta vez es un cuento algo más largo que los anteriores, con una elaboración argumental mayor y más compleja, que perfectamente podría cuadrar dentro de la Serie Blanca de los libros infantiles y juveniles de la colección Barco de Vapor, de la Editorial SM, colección con la que todos los niños españoles hemos crecido desde el último cuarto del siglo XX a la actualidad. La Serie Blanca es la dedicada a los niños que comienzan a leer ya relatos, por lo que suele contener frases cortas, lenguaje adaptado, ilustraciones a color e historias no muy largas, pero tampoco cortas. El libro de Chus podría cuadrar en dicha serie, si bien es cierto que usa frases más largas y algunos conceptos de educación transversal más complejos que quizá necesiten de la lectura acompañada de algún adulto para que, en caso de dudas en el niño y la niña, puedan realizar las preguntas que consideren pertinentes.

El cuento es uno sólo, pero contiene dentro de sí varios cuentos, usa así un recurso literario iniciado en la novela por Miguel de Cervantes. La historia central es la de Luisito, un libro joven que nunca ha sido leído por el niño al que fue regalado, el cual lo maltrató físicamente y lo abandonó. Luisito llega a la librería Olivetti (buen guiño de la autora a la famosa marca de máquinas de escribir) donde, aquí aparece un cuento dentro del cuento, el librero, que también es restaurador de libros, tiene una fuerte depresión a causa de la muerte de su esposa, mientras trata de sacar adelante el cuidado de sus hijos y la librería, que está muy descuidada. En la librería, cuando no hay humanos, volvemos al cuento principal, Luisito se relaciona y habla con los otros libros que hay allí. Los dos cuentos se irán entrecruzando desde ese momento como uno solo. Ahora veremos que los cuentos, como las personas metafóricamente, sólo se pueden conocer entre sí cuando se leen entre ellos. Cada libro tiene su propia historia y es necesario que cada libro sea consciente de su propio relato, de quien es, a la vez que ha de conocer las otras historias, al otro. Luisito no conocer su historia y son los otros los que le ayudan a conocerse, se ofrecen a leerle su historia, pese a que sus páginas están rotas, pintadas, dobladas y hasta arrancadas, impidiendo que sea una libro completo. Aquí aparece el tercer cuento que se entrecruza con  los otros dos, el de la historia del libro Luisito. Esta historia se irá contando por partes interrumpidas por la interacción de las otros dos cuentos en marcha de los libros con Luisito y del librero y sus hijos. La historia de Luisito es la de un caballito de mar que le gusta pintarse y bailar ballet lo que le hace diferente al resto de caballitos de mar. Este caballito de mar sufre un accidente que le impide bailar. Ahí están arrancadas las hojas de Luisito y los libros no pueden terminar de leerle, pero entre todos ayudan a Luisito a que el librero le ayude a ser un libro completo, dejándole en un lugar donde se acuerde de restaurarle. De hecho lo encuentran los hijos del librero que son los que le sacan de su inactividad al implorarle que arregle el libro, porque han leído el cuento y está incompleto. El librero les anima a la vez a ellos a escribir un final para el libro y de repente tenemos a Luisito completado entre todos. Ahora el cuento del caballito de mar pasa a una fase de la importancia del esfuerzo en aquello que crees para superar los problemas. Y para cerrar el círculo, es el trabajo común de la familia del librero lo que hace que el librero redescubra su pasión por los libros, lo que le devuelve a una vida activa, donde su producción con los libros hace que todos los libros de la librería tengan nuevos y más lectores en Villalibro, lo que les daba numerosas vidas completas.

Como se ve, es un libro que vuelve a transmitir valores educativos transversales, puestos al día del siglo XXI, y que tiene cierta consonancia con los dos cuentos anteriores de Chus López. Tiene un ejercicio de imaginación correctamente acompañado de los dibujos a mano con colores pastel, totalmente al margen de las producciones por ordenador que tanto abundan en las publicaciones actuales. Devuelven algo de la esencia de cuentos de las infancias de los adultos actuales a los cuentos de los niños y niñas de hoy. 
 

Reseña escrita por Daniel L.-Serrano "Canichu".

sábado, 17 de febrero de 2024

Tacha

Título: Tacha.
Autor: Francisco José Martínez Morán.
Editorial: Renacimiento.
Año de publicación: 2018 (1ª edición).
Colección: Poesía.
Nº de volumen en la colección: 131.
Género: Poesía.
ISBN: 978-84-17266-60-8
 
Tacha fue el décimo libro de Francisco José Martínez Morán, no todos fueron de poesía, pero este sí lo era. Fue publicado en 2018 por la muy reconocida editorial de poesía española actual Renacimiento. Fue un libro de un tamaño apto para el porte en bolsillos amplios, con cubiertas rústicas y solapadas, en papel rugoso con una ilustración de un cuaderno de notas con tachaduras, todo en referencia evidente al título, que a la vez hacía referencia a una temática metafórica o alegórica de los poemas. Le había antecedido en el mismo año una novela, Amistades comunes. Había que remontarse a 2015 para su anterior libro de poesía, Grand3 Tercera Phase. Aquel, como ya se dijo, era un libro que se salía de la poesía habitual de Martínez Morán, por lo que al lector que le sigue le cabía preguntarse si seguiría indagando por esa vía más experimental y contracultural o volvería a una poesía directa, existencial, pero menos contracultural. Hay que pensar que la novela que había sacado ese año 2018 tenía un algo experimental y existencial a la vez. El libro fue presentado en Alcalá de Henares en junio, allí el poeta leyó algunos de los poemas, en la librería Diógenes. Se afianzaba en los poemas breves que van a ser más característicos en él en los siguientes poemarios. Viene en su temática a reiterar una evolución personal respecto a todo lo contado en los anteriores poemarios, como muestra de una reflexión vital personal. Nos hace saber que está en plena lucha constante por evolucionar y por seguir, en un sentido muy vitalista, aunque aún contiene cierta melancolía existencial. Trata de repetir algunas cosas ya vividas para tomar otros caminos nuevos, pero la reiteración le hace tachar lo nuevo, por recordarle lo anterior. Nos hace pensar en el poema "Oda a la alegría", de Schiller, de 1785, a la que Beethoven puso música en su novena sinfonía. Schiller invita a abandonar los viejos tonos, por unos nuevos y más vitales, más alegres, invita a crear un nuevo mundo desde la experiencia propia, y algo de esto hay en Tacha.

De claro en claro el mundo es siempre el mismo.
Dedico tanto seso a la locura
que, al cabo, la razón no me parece
más que una necia danza para los muertos. 

Hay una positividad vitalista en el cambio. En un poema muy breve de dos versos dirá:
 
La pieza que no encaja:
esa es la imprescindible.
 
Pero el poemario también es cierto que da constancia de los pasados acabados o evolucionados y que no volverán, que el presente tacha, y en ese sentido sigue presente el existencialismo que a veces nos recuerda el nihilismo del ser, la nada que es la existencia, en un libro que se divide en cuatro partes: "Borrado", "Los ciegos escribanos del olvido", "Canciones" y "Tacha".  

Frente a la biblioteca, tres cipreses
altísimos: reparo en la incontable
nómina de cadáveres que escoltan.

Están bien elegidos.

Las metáforas y las alegorías en un lenguaje asequible se suceden en numerosas imágenes y reflexiones a lo largo de todo el poemario, transformando en un acto de poesía el pensamiento. En ese sentido es uno de los poemarios más delicados de Martínez Morán, y el que le aproxima a un relativo existencialismo que también mostró Unamuno en sus poemas, que también escribió. Puede que haya algo "unamuniano" en este libro, pero es genuinamente Martínez Morán. Trasciende el paso del tiempo como aquel que es lo que genera la tacha, la tacha de nuestros actos y de nuestro ser. Y frente a ello: la vitalidad del que aún es, de quien ha sido, pero es. 

No supe regresar de una manera 
más digna o memorable: 
vencido y degradado piso un suelo
que no me reconoce, muerdo un pan
sin huella de mis dientes, yago al borde
de una cama que abjura de mis huesos.

Sé lo que debo hacer y, sin embargo,
me obstino en el error, hay un placer
oculto en la nostalgia de lo roto.

La idea lanzada musicalmente en los versos séptimo y octavo de este poema expresan una contradicción que todos tenemos en nuestro ser, en nuestra forma de vida, que es una genialidad sincera. Martínez Morán perfecciona en este libro su gran habilidad para sintetizar en pocas palabras grandes sensaciones y pensamientos universales sobre la existencia y el "yo" que somos.
 
Si Obligación me parece el mejor de sus libros para mi gusto, hasta la fecha, Tacha, sin duda, le sigue.

Reseña escrita por Daniel L.-Serrano "Canichu".

martes, 13 de febrero de 2024

María de Orozco (1635-1709)

Título: María de Orozco (1635-1709).
Autora: María Isabel Barbeito Carneiro.
Editorial: Editores del Orto.
Año de publicación: 1997 (1ª edición).
Colección: Biblioteca de Mujeres.
Nº de volumen en la colección: [Sin número].
Género: Biografía; Hagiografía; Esoterismo.
ISBN: 978-84-7923-129-7
 
Ya hablamos de María Isabel Barbeito como parte de las autoras ligadas a Alcalá de Henares cuando hablamos de un artículo sobre María de Orozco, que publicó en el libro colaborativo Mujeres en Alcalá de Henares, un paseo por su historia (2017), coordinado por Pilar Lledó. Se trata de una autora nacida en La Coruña que lleva desde niña viviendo en Madrid. Es Doctora en Letras por la Universidad Complutense de Madrid y miembro de la Institución de Estudios Complutenses (IEECC), asentada en Alcalá de Henares, que organiza los encuentros de historiadores del Valle del Henares y publica los Anales Complutenses, donde ella ha publicado varias veces. Comenzó a publicar numerosos artículos en libros de actas de Historia y revistas dedicados a biografías fundamentalmente de mujeres escritoras del Siglo de Oro de la Literatura española (siglo XVI al XVII), aunque abunda sobre todo en aquellas que fueron religiosas o pertenecieron a órdenes religiosas. También tiene sus propios libros, de hecho hoy volvemos a ponerla de relieve por su monografía biográfica María de Orozco (1635-1709), personaje sobre el que ha escrito numerosas veces. Fue un libro de noventa páginas publicado por Editores del Orto en 1997, dentro de su colección Biblioteca de Mujeres. Se trata de una editorial dedicada especialmente a libros de temas religiosos y filosóficos, pero también literarios. 

María de Orozco era hija de Pedro de Orozco un noble de Guadalajara bien posicionado y emparentado con los Mendoza, cuyo poder político con los reyes Augsburgo era alto. María de Orozco no nació especialmente agraciada para los cánones de belleza de la época, tenía también algunas deformaciones, así como algunas taras mentales, posibles resultados de problemas genéticos por una endogamia familiar o de otro tipo. Desde muy joven decía ver visiones. En teoría le aparecían y desaparecían llagas sangrantes en los mismos lugares que las que tuvo Cristo crucificado, las de ella podrían ser autoinfringidas, pero sus seguidores creían en la veracidad milagrosa de la aparición mística de las mismas. Así mismo decía que se le aparecían ángeles y también el Diablo. Se sospecha desde las biografías actuales, en un análisis de lo que ella escribió y lo que otros escribieron de ella, que es posible que sufriera maltratos físicos que agravaron su estado mental en el caso de que sus visiones místicas no fueran reales. 

Su padre la metió en un convento carmelita de Guadalajara, pero dadas sus visiones místicas, no creídas por las monjas, fue expulsada y hubo de irse incluso de la ciudad, se vino a vivir a Alcalá de Henares, a la calle Nueva, ciudad donde vivían algunos Mendoza. Fue admitida como beata profesa del Carmen.

En Alcalá dijo estar en contacto con ángeles y con todos los santos del Cielo, pero también que le visitó el Diablo varias veces, que incluso le tentó abriéndole las puertas del infierno en el lugar donde está hoy día la ruinosa cárcel galera. Sea como sea, su credibilidad osciló entre quien no creyó nada y quien la creyó todo... Llegó a ser una de las consejeras del rey Felipe IV y también de Carlos II, "el Hechizado". Escribió algunos textos. Como sea, murió en 1709. Algunas personas ligadas a la Iglesia Magistral de Alcalá pidieron su santidad, pero esta nunca ha sido aceptada. 

Reseña escrita por Daniel L.-Serrano "Canichu".

viernes, 2 de febrero de 2024

Obligación

Título: Obligación.
Autor: Francisco José Martínez Morán.
Editorial: Polibea.
Año de publicación: 2013 (1ª edición; prólogo de Juan Antonio González Iglesias).
Colección: El Levitador.
Nº de volumen en la colección: 32.
Género: Poesía.
ISBN: 978-84-86701-55-0


En 2013 Martínez Morán publicó el poemario Obligación, con la editorial Polibea. Me parece el mejor de los poemarios de Francisco José Martínez Morán. Encuentro en este libro un muy excelente libro. Contiene algo de la corriente literaria llamada nueva sensibilidad, esa corriente literaria que identificó y ayudó a crear Luis García Montero. Probablemente, aunque Martínez Morán tiene una carga existencialista importante en su obra, algún día, cuando se vayan escribiendo los ensayos sobre literatura del siglo XXI en España, Martínez Morán quedaría encuadrado en la nueva sensibilidad y este libro, para mí, sería el más destacable en ese sentido. Al menos de momento, pues el autor es joven, queda obra por delante. La cotidianidad pasada a metáforas de emoción humana a través de sucesos y objetos materiales es todo un trabajo de inteligencia y sensibilidad muy agradable. El libro fue publicado por la editorial Polibea dentro de su colección El Levitador, como el volumen 32. Contaba con un prólogo de Juan Antonio González Iglesias y una cubierta con una fotografía realizada por Julio Castelló. Además, la edición estuvo asesorada por Ángel Luis Vigaray, Ángel Rodríguez Abad, José Ignacio Serra y Matilde Muñoz. 

En el prólogo del libro, Juan Antonio González habla de los caminos circulares y en espiral de los poemas de este libro. Se admira del uso de una palabra y sus contrarios en un mismo verso, o de la repetición por anadiplosis en el comienzo y el final de la misma palabra girando los sentidos y volviéndolos más trascendentes de lo que en principio eran. Y es cierto que el libro y sus poemas tienen una cuidada arquitectura, pero es el propio autor quien en el primer poema nos advierte que hay un girar de las cosas en su sentido que nos descubren que no todo es lo que en un principio podemos creer que sólo son.

Te equivocas si piensas
que todo lo que has visto es la versión
definitiva: siempre ante los ojos
se despliega un proyecto que no acaba,
la maqueta de un plan que ya ha previsto
la fuerza ingobernable de su ruina.


El concepto de algo y su contrario se va a repetir como algo obligado en la existencia, algo tan obligado que hace tener sentido la existencia, lo que en parte parece un contrasentido. Hay además un sentido de lucha sin rendición que nos lleva a un especie de esperanza, aún cuando en todo aspecto de la vida se va a la ruina, porque la existencia misma de algo o el de ser se evoluciona a la inexistencia. Pero es esa lucha la que da un sentido vitalista y positivo inusual en otros poemarios del autor.

Unirse a los vencidos y esperar
que te tiendan la mano, porque tú
aún estás cayendo en la batalla.

Pero es también un poemario con numerosas reflexiones sobre el amor y de amor. Y sin embargo, siempre está el sentido del transcurrir de todas las cosas obligadas a tener su contrasentido. "A contraluz las cosas / parecen más sinceras", llega a afirmar. Su alguien me preguntara qué poemario recomendaría actualmente de Martínez Morán sería este, sin duda. Uno de mis poemas más apreciados en él dice así:

He pisado cristales con los pies 
descalzos: el sendero de mis huellas
sobre la nieve es rojo, y tan brillante
como vino brindado a la blancura
de un océano eternamente triste.

La pureza nívea es marcada por la roja pasión de la vida, de la sangre que mana herida y se va perdiendo a cada paso que damos por esa nieve del invierno como un océano eterno en el que apenas dejamos huella al pasar por él. Una preciosidad. 

Martínez Morán nos citará títulos sacados del latín clásico, pero su poemario, extenso en metáforas y recursos, se nos hará fácilmente comprensible. Nos hará usar el intelecto para entenderlo, no es una poesía fácil, como la sencillez de sus expresiones parecieran hacernos creer. No es un poemario para el aplauso facilón, sino para sonsacar la reflexión y el alma. Tiene en él ya marcado su camino en el poema breve. Con  pocas palabras expresa mundos enteros. No es excesivamente breve, ni cae en la melancolía. Es una arquitectura perfectamente montada. No pretende ser amable, y lo es, no pretende ser áspero, y en alguna conclusiones puede serlo ante lo que a todos nos afecta por obligación del ser, del existir... y su contrario. Es verdad, va en espirales que estimulan nuestro pensamiento. Repito, para mi gusto: su mejor poemario hasta la fecha.

Reseña escrita por Daniel L.-Serrano "Canichu".